Habemus Papam

Suena un poco extraño que todo el mundo en estos días haya estado pendiente de una chimenea en el Vaticano de la que puede salir humo negro o blanco, la famosa fumata blanca, dicho asi suena a locura colectiva pero no es el caso. Es la forma que la comunidad católica o simplemente los más curiosos tienen de saber cuando ha sido elegido el nuevo pontífice, y en este caso ha llegado con sorpresa. El primer Papa latinoamericano, el argentino Jorge Maria Bergoglio, ahora más conocido como Francisco o Paco para los amigos.

Resulta curiosa la forma que el cine ha tratado el mundo que rodea a toda la figura del Sumo Pontifice de Roma, el Vaticano, los cardenales, etc. Es un mundo de lo más hermetico, cerrado y con unas tradiciones que parecen sacadas de otra época. Casi todas los largometrajes se centran en la forma de su elección, el tan manido conclave que hemos escuchado hasta la saciedad estos días por radio y televisión o en la figura de algun Papa que tuviera un gran significado en la historia, vease el caso de Alejandro VI en la Italia convulsa de finales del siglo XV, de moda ahora por dos aproximaciones en pantalla bastante recientes y con resultado de lo más dispar. En primer lugar para mi la horripilante película española "Los Borgia" (2006) donde el actor catalán "Lluis Homar" encarnaba a Alejandro VI y la serie de televisión "The Borgias" (2011) cuya producción recae en la figura del director Stephen Frears. En ella y con resultado opuesto a la película española nos centramos en la vida de la familia de origen valenciano Borja, o en su acepción más conocida como Borgia, donde destaca sobre todo el excelente Jeremy Irons en la figura del polémico pontífice. Otros ejemplos de Papas que se han adaptado de forma mucho más banales son la vida de "Juan XXIII" o la de "Juan Pablo II", adaptadas a la pequeña pantalla en largometrajes sin ninguna trascendencia. Ver y olvidar.

Sobre el conclave y la futura eleccion del Papa hay documentales, libros, etc, pero me gustaria comentar dos películas que son bastante destacables. Una de ellas es la que supongo casi todo el mundo habrá visto a estas alturas, "Las sandalias del pescador" (1968) que se centra en la figura de Kiril Lakota, un sacerdote católico ucraniano represaliado por la URSS encarnado por el actor mexicano
Anthony Quinn, el primer Papa latinoamericano pero en este caso en la ficción,  y que acaba siendo elegido Sumo Pontífice de Roma, la otra es "Habemus Papam" (2011) del director italiano Nanni Moretti donde un ataque de pánico del nuevo Papa tras su elección a la hora de saludar a los fieles da con situaciones de lo más rocambolescas. La renuncia posterior del actor que interpreta al pontífice, Michel Piccoli, se anticipa casi dos años a la que hizo el pasado mes de febrero Benedicto XVI por no encontrarse con las fuerzas suficientes para seguir con su labor pastoral, a veces la ficción supera a la realidad.

Para concluir, una curiosidad y es la forma que Francis Ford Coppola en El Padrino III (1990) expone la posible teoria de la muerte de Juan Pablo I, por medio de una taza de te envenenada, antecesor de Juan Pablo II y que apenas duró 33 dias en el cargo. Otra teoria conspiratoria a la larga lista que se ha escrito sobre el tema.