Existen multitud de casos donde se han adaptado grandes obras y personajes del comic al mundo del cine, eso sí algunos con mejor fortuna y otros la verdad no tanta. En el primero de los casos podríamos encontrarnos con personajes como Batman, Spiderman o Superman aunque su multitud de secuelas tienen mas altibajos que una montaña rusa. En el caso contrario pues dos grandes figuras del comic que para mi gusto sus adaptaciones al mundo del cine dejan bastante que desear como son "Asterix y Obelix" y uno al que le tengo especial cariño por leer sus comics desde pequeño y tener aun por casa un montón de sus historietas, me refiero a "Mortadelo y Filemon", todo un despropósito y donde lo único que merecen la penas son sus películas animadas de los años 70.
Y caso aparte pues tenemos otro de los grandes personajes que ya tuvo dos adaptaciones a la gran pantalla en los años 60, "Tintín y el misterio del Toisón de Oro" (1961) y "Tintín y el misterio de las naranjas azules" (1964) que como curiosidad comentar que se rodó en España y que por lo poco que he visto tiene una pinta horrible, decir tiene que fue un absoluto fracaso. Un personaje como Tintin para mi gusto queda mucho mejor como personaje animado, para eso ya se hicieron las películas en dibujos animados recientementes publicadas en una buena edición en formato DVD y Blu-Ray. Siempre he pensado que este personaje creado por Hergé no ha sido adaptado como debería y hemos tenido que esperar a un director como Steven Spielberg para darle todo el esplendor que se merece. Se ha cuestionado mucho que para ello se hiciera con la técnica mas utilizada hoy día como es la "captura de movimientos" con el uso de actores reales, hay multitud de casos como "Beowulf" o "Polar Express" donde se observa hasta donde puede llegar esta técnica y que para mi le da un toque de realismo que me agrada.
En esta película el director adapta el libro de Hergé "El secreto del unicornio" aunque introduce a personajes y situaciones que no salen en este comic como a la cantante de opera Bianca Castafiore, el mundo del cine siempre intentando adaptar el estilo literario algo que muchas veces no se consigue aunque en este caso el director ha salido airoso de tal empresa.
Spielberg sabe poner todo su buen hacer y su maestría en esta cinta de animación consiguiendo todo un tour de force en este tipo de cine. No es que haya inventado la rueda pero al menos le deja a uno pegado a la butaca del cine las casi dos horas de duración. Una sucesión de escenas de lo más impactantes como las del barco o las que transcurren en una persecución de lo más alocada en las calles de un país africano de nombre imaginario, en eso Spielberg siempre ha sido un maestro y aunque novel en estas lides de la animación, no cuento sus aportaciones en Jurassic Park, parece que lo haya hecho durante toda su vida.
Respecto a los actores que encarnan a los personajes del comic, tenemos a "Jamie Bell" haciendo del intrépido Tintín, actor ya de sobra conocido en papeles de largometrajes como Billy Elliot o King Kong, "Andy Serkis" como el capitán Haddock, actor bastante conocido por interpretar al gollum del señor de los anillos y "Daniel Craig", el james bond actual para más señas, haciendo de Rackam. Todos lo hacen bastante bien, recordemos que es cine de animación, aunque el personaje de Tintín a veces resulta de lo más inexpresivo. No hay que olvidar al fiel compañero de nuestro valiente reportero, el perro Milú que aunque totalmente realizado por ordenador no desentona para nada en este largometraje. Un punto que no me ha gustado es los personajes de los policías Hernández y Fernández, interpretados por los cómicos "Nick Frost" y "Simon Pegg", vistos en Zombies Party, que aún siendo cine de animación están demasiado caricaturizados y no me acabaron de convencer.
A destacar la banda sonora del ya inigualable y sempiterno acompañante en las películas de Spielberg "John Williams" y el guión de "Steven Moffat" creador de grandes series en la BBC inglesa como la última adaptación del mas famoso detective de la literatura, "Sherlock".
Sin duda un personaje del que Spielberg sabe sacar todo su potencial, a veces me recuerda a un Indiana Jones metido en líos en multitud de países y viviendo inigualables aventuras. Esperemos que haya más aventuras de este personaje, se anuncia secuela para 2013, "Las aventuras de Tintín: prisioneros del sol" aunque aún es muy pronto para poder saber en que quedara todo esto. Sólo me queda decir una cosa: larga vida a Tintín!
Y caso aparte pues tenemos otro de los grandes personajes que ya tuvo dos adaptaciones a la gran pantalla en los años 60, "Tintín y el misterio del Toisón de Oro" (1961) y "Tintín y el misterio de las naranjas azules" (1964) que como curiosidad comentar que se rodó en España y que por lo poco que he visto tiene una pinta horrible, decir tiene que fue un absoluto fracaso. Un personaje como Tintin para mi gusto queda mucho mejor como personaje animado, para eso ya se hicieron las películas en dibujos animados recientementes publicadas en una buena edición en formato DVD y Blu-Ray. Siempre he pensado que este personaje creado por Hergé no ha sido adaptado como debería y hemos tenido que esperar a un director como Steven Spielberg para darle todo el esplendor que se merece. Se ha cuestionado mucho que para ello se hiciera con la técnica mas utilizada hoy día como es la "captura de movimientos" con el uso de actores reales, hay multitud de casos como "Beowulf" o "Polar Express" donde se observa hasta donde puede llegar esta técnica y que para mi le da un toque de realismo que me agrada.
En esta película el director adapta el libro de Hergé "El secreto del unicornio" aunque introduce a personajes y situaciones que no salen en este comic como a la cantante de opera Bianca Castafiore, el mundo del cine siempre intentando adaptar el estilo literario algo que muchas veces no se consigue aunque en este caso el director ha salido airoso de tal empresa.
Spielberg sabe poner todo su buen hacer y su maestría en esta cinta de animación consiguiendo todo un tour de force en este tipo de cine. No es que haya inventado la rueda pero al menos le deja a uno pegado a la butaca del cine las casi dos horas de duración. Una sucesión de escenas de lo más impactantes como las del barco o las que transcurren en una persecución de lo más alocada en las calles de un país africano de nombre imaginario, en eso Spielberg siempre ha sido un maestro y aunque novel en estas lides de la animación, no cuento sus aportaciones en Jurassic Park, parece que lo haya hecho durante toda su vida.
Respecto a los actores que encarnan a los personajes del comic, tenemos a "Jamie Bell" haciendo del intrépido Tintín, actor ya de sobra conocido en papeles de largometrajes como Billy Elliot o King Kong, "Andy Serkis" como el capitán Haddock, actor bastante conocido por interpretar al gollum del señor de los anillos y "Daniel Craig", el james bond actual para más señas, haciendo de Rackam. Todos lo hacen bastante bien, recordemos que es cine de animación, aunque el personaje de Tintín a veces resulta de lo más inexpresivo. No hay que olvidar al fiel compañero de nuestro valiente reportero, el perro Milú que aunque totalmente realizado por ordenador no desentona para nada en este largometraje. Un punto que no me ha gustado es los personajes de los policías Hernández y Fernández, interpretados por los cómicos "Nick Frost" y "Simon Pegg", vistos en Zombies Party, que aún siendo cine de animación están demasiado caricaturizados y no me acabaron de convencer.
A destacar la banda sonora del ya inigualable y sempiterno acompañante en las películas de Spielberg "John Williams" y el guión de "Steven Moffat" creador de grandes series en la BBC inglesa como la última adaptación del mas famoso detective de la literatura, "Sherlock".
Sin duda un personaje del que Spielberg sabe sacar todo su potencial, a veces me recuerda a un Indiana Jones metido en líos en multitud de países y viviendo inigualables aventuras. Esperemos que haya más aventuras de este personaje, se anuncia secuela para 2013, "Las aventuras de Tintín: prisioneros del sol" aunque aún es muy pronto para poder saber en que quedara todo esto. Sólo me queda decir una cosa: larga vida a Tintín!